27 marzo 2006

El Sueño de la Razón produce MONSTRUOS
Vuelven los olores a leña, hiedra, tierra mojada, vida silvestre, aguas limpias, largas tardes, cielos naranjas y recuerdos de besos que queman la memoria y el corazón… Pero todos esos recuerdos cada vez llegan menos hondo, casi susurrando en lugar de llamando a la memoria, casi como hojas caducas que no volverán a crecer.

Ahora es sólo el sueño el que expía cada pensamiento, es sólo el sueño el que limita el despertar.

Si nos conforman los sueños, ¿cómo no dejarse atrapar por los momentos de pesadilla, dicha, llanto, sonrisa, caída y levantamiento que acechan tras el párpado postrado? Porque no serán minutos, ni horas…, lo sabes; ya son días lo que cazan tu memoria, sin importar ya nada más que el instante que teje el subconsciente, derramando la esencia de la vida y muerte, en un solo punto.

Si estamos hechos de sueños, dejad que los sueños nos hagan. Si queremos soñar, dejadnos, mas despertad el mal que anida dentro para que huya lejos, porque comerá vuestra voluntad hasta cercenaros y el despertar será marchito, si llega…
*Grabado de Goya. "El sueño de la razón produce monstruos".